Flora Destacada en Parque Aguas de Ramón
Quillay: árbol perennifolio, de copa globosa, que alcanza hasta 20 metros de diámetro. Sus hojas son duras 5 cm, color verde claro brillantes y tiene 4 a 8 dientes en el borde. Flores verde blanquecinas con forma de estrella. Su fruto es una cápsula de forma estrelladas con muchas semillas aladas en su interior.
Peumo: árbol perennifolio, de follaje denso y coloración verde oscuro. Alcanza 20 metros de altura y hasta 1 metro de diámetro máximo. Su corteza es delgada, de color verde claro, y se agrieta a medid que envejece. Sus hojas son duras, alternas, anchas y aovadas, algo onduladas. Sus flores, amarillo-verdosas, se presentan como densos racimos. Su fruto es una drupa de color rojo, con semillas grandes y pesadas.
Litre: árbol perennifolio, de copa globosa. Alcanza hasta 15 metros de altura y 0,5 metros de diámetro máximo. Es común encontrarlo en forma arbustiva. Sus hojas son bastante características, pues su coloración verde contrasta muy bien con la nervadura y bordes amarillos. Su floración es abundante y atrae muchos insectos, para luego generar un montón de frutos amarillo-crema que contienen solo una semilla en su interior.
Boldo: tolera sequías y suelos pobres, requiere cierta humedad ambiental y no tolera heladas. En forma natural alcanza más de 10 m de altura, de tronco corto y ramificado de hasta 1 m de diámetro. Sin embargo, dado el continuo aprovechamiento que ha tenido para leña y carbón, y a su capacidad para rebrotar, es frecuente encontrarlo como un arbusto, con varios troncos delgados que nacen desde el tocón o cepa original.
Quisco: Planta arbustiva-arborescente de hasta 8 m de altura, ramificada desde la base o desde sus tallos laterales. Costillas 12 a 16 bajas y divididas en tubérculos difusos grandes, Espinas del margen de la areola 8 a 13, de 1-4 cm.; 1 espina central recta de entre 6 a 12 cm. Flores en forma de embudo, alrededor de 12 – 15 cm. De largo, blancas con tintes rojizos, fruto redondeado, de unos 5 – 6 cm., verde, comestible.